JUNTOS SOMOS MÁS FUERTES!!!

La diabetes aumenta el riesgo de infecciones en las encías y caries. La glucosa alta en sangre puede causar enfermedad periodontal y sequedad bucal, complicando el control de la diabetes.

La diabetes puede disminuir la densidad ósea y aumentar el riesgo de fracturas. La glucosa alta interfiere con la formación y reparación ósea, elevando la fragilidad de los huesos.

La diabetes está asociada con un mayor riesgo de depresión y ansiedad. Estos problemas de salud mental pueden dificultar el control de la diabetes y empeorar sus complicaciones.

Los trastornos del sueño, como la apnea del sueño, son comunes en personas con diabetes. La mala calidad del sueño puede aumentar la resistencia a la insulina y dificultar el control de la glucosa.

Hormonas como la leptina, grelina y cortisol influyen en la diabetes al afectar el apetito, el metabolismo y los niveles de glucosa. Estas hormonas pueden complicar el manejo de la diabetes.

La diabetes incrementa el riesgo de enfermedades cardíacas debido al daño en los vasos sanguíneos y nervios. Esto puede conducir a hipertensión, infartos y derrames cerebrales.